
Calidad antes y después de grandes acontecimientos
Son los hechos históricos los que han marcado de manera significativa el concepto de calidad a lo largo de la historia, su transformación y avances tienen mucho que ver con los grandes acontecimientos como guerras mundiales, la transición entre revoluciones industriales y llegando hoy en día a una parálisis mundial que nos invita a preguntarnos:
¿Qué pasará con la calidad después de la reciente pandemia COVID-19?
Las claves para responder a esta pregunta, las tenemos en los grandes acontecimientos recordados en los libros de historia y otros que no fueron tan representativos, pero aportan un gran valor a la forma que hoy en día se conoce a la calidad.
Generaciones anteriores, nos dieron a personajes claves dentro de la calidad; tales como: Joseph Juran, William E. Deming, Philip B. Crosby, Kaoru Ishikawa y hoy en día la Generación X y los Millennials tenemos la responsabilidad de seguir escribiendo la historia de la calidad, aceptando el reto de refrescar su concepto, tomando en cuenta el contexto de una revolución industrial llena de avances tecnológicos, un panorama económico complejo, clientes con necesidades y expectativas orientadas a la sostentibilidad, cada vez más exigentes con la mejora contínua de los productos y servicios que consumen.
Si bien es cierto que antes y después de las guerras mundiales, las empresas se dieron cuenta que necesitaban urgentemente modificar sus estrategias de producción, la historia cuenta que los primeros pasos remontan a la antigua Babilonia, con una historia bastante particular y propia de esa época, así comienza la historia de la calidad:
«Si un albañil construye una casa para un hombre, y su trabajo no es fuerte y la casa se derrumba matando a su dueño, el albañil será condenado a muerte.»
Los inspectores fenicios suprimieron todas las transgresiones repetidas de las normas de la calidad, cortándole la mano a quien hacía un producto defectuoso; aceptaban o rechazaban los productos y ponían en vigor las especificaciones gubernamentales.
Luego de un inicio no tan agradable, nos encontramos con la industrialización, sustituyendo en gran parte el trabajo manual por el trabajo mecánico, fue durante la primera guerra mundial cuando la calidad se insertó de manera más representativa en las industrias, la producción necesitaba de inspectores encargados de supervisar la efectividad de las operaciones realizadas y desde entonces esta figura ha sido clave para controlar los productos conformes.
En los primeros años del siglo XX nos encontramos con otros personajes, hoy en día admirados por sus logros y aportes al advenimiento de la organización automotriz. La estrategia empresarial de Henry Ford y los métodos de producción pregonados por Frederick Taylor impulsaron las nuevas ideas sobre cómo manejar la organización industrial.
El siguiente cambio se dio en base al control estadístico, entre los años 1930 y 1950, ya no era suficiente con la inspección, se incluye el análisis y gran parte de los avances se vieron obligados a realizarse durante la segunda guerra mundial, identificando que el producto defectuoso se podía corregir en las etapas de producción, sin esperar a obtener el producto final. Comienzan aparecer los programas de sistemas de calidad, incorporando la planificación en todos los procesos operativos y administrativos.
Hacemos un STOP;

para reflexionar sobre estos acontecimientos, ya que se consideran la base de lo que hoy en día conocemos como calidad y su estructura fue enriquecida por momentos agradables y otros incomodos, sin duda alguna el ser humano tiene la capacidad de crear e innovar en cualquier escenario, pero cuando se siente retado es el momento que desarrolla mejores competencias y estrategias adaptadas a los retos, contextos y eventos no esperados.
La década de los 80 también se vio marcada por guerras de impacto menor, como la guerra fría, el terrorismo, la aparición de enfermedades como el VIH, sin embargo, paralelamente se crea la primera computadora y nace una de las mayores herramientas El internet, haciéndonos la pregunta:
¿Cómo hacían para gestionar sistemas antes de estos grandes inventos?
Seguramente no fue sencillo, pero las ganas de mejorar continuamente fueron suficientes para lograr cubrir las necesidades y expectativas de los clientes, con el enfoque de administrar la calidad para ser competitivos en medio de la gran expansión de las empresas con cultura de calidad.
En los años 90 y hasta la fecha, la Calidad total es la protagonista, con la estandarización de los sistemas, normas reconocidas mundialmente como ISO 9001 y metodologías como Lean, 5s, just in time, entre otras que se ven involucradas dentro de la cuarta revolución industrial y la aparición de la calidad 4.0 y Big Data, son hoy en día el escenario con el que deben trabajar a diario los responsables de gestionar la calidad.
Nos encontramos en el 2020, un año que al parecer trae más retos de los esperados, toma más fuerza el teletrabajo y crece la incertidumbre entre los empresarios, de ¿cómo se verá afectada la continuidad de sus negocios?
De esta generación saldrá el próximo nombre recordado en los libros de calidad, la renovación de un concepto que hoy en día tiene acompañantes sumamente importantes como sostenibilidad, responsabilidad social, inocuidad, seguridad industrial, propiedad intelectual, habilidades duras y blandas que armadas de forma correcta darán paso a las nuevas metodologías y estrategias que necesita el siglo XIX para no quedar paralizado ante los cambios que se avecinan.
¿Preparados para asumir el reto de renovar a la Calidad?
